TikTok está dejando atrás a la generación Z, pero eso puede ser una buena noticia
Keara Sullivan es conocida por sus vídeos en TikTok, en los que expone las debilidades de su «híperconectada» generación. Desde finales de 2020, la humorista neoyorquina ha acumulado más de 400.000 seguidores, la mayoría de ellos miembros de la generación Z. Sin embargo, últimamente se ha dado cuenta de que muchos usuarios no entienden sus bromas.
En diciembre, publicó un vídeo en el que reflexionaba sobre por qué el Monte Rushmore (el monumento con las cabezas talladas de George Washington, Thomas Jefferson, Theodore Roosevelt y Abraham Lincoln) le resultaba extraño. «Me dije: ‘Acabo de recordar que esto existe, y me resulta muy raro. ¿Por qué decidimos tallar esas cabezas en una montaña? Si la sociedad humana colapsara y dentro de 1000 años se volviera a descubrir esto, probablemente pensarían que son dioses en lugar de hombres normales'», se pregunta Sullivan. De repente, el vídeo se llenó de comentarios de hombres mayores que no entendían para nada su reflexión. «Aprende historia. Estos hombres no eran normales», escribió uno. «Ellos fundaron el país en el que vives», dijo otro. (En realidad, sólo dos de ellos ayudaron a fundar Estados Unidos).
La experiencia de Sullivan con este tipo de usuarios no es una excepción: las personas mayores y sus críticas inundan TikTok. A principios de este año, el Pew Research Center publicó un par de encuestas sobre el uso de TikTok y otras redes por parte de los distintos grupos demográficos en Estados Unidos. En su análisis, el escritor Ryan Broderick y el investigador Adam Bumas descubrieron algo extraño: contrariamente a la creencia de que TikTok es para la generación Z, las personas de entre 30 y 40 años representan casi el 40% de los usuarios encuestados. Es más, este grupo crece más rápido que el de los jóvenes.
Broderick sostiene que el envejecimiento de la plataforma marca el inicio del declive de TikTok. Al igual que Instagram y Facebook antes que ella, sugiere que la nueva aplicación está a punto de convertirse en un lugar aburrido y lleno de spam.
No obstante, que la base de usuarios de TikTok esté envejeciendo no significa que la aplicación esté «acabada». Al contrario, los expertos y usuarios con los que he hablado creen que la plataforma puede estar, sencillamente, generalizándose. Probablemente, TikTok no se parezca tanto a Facebook, sino más bien a YouTube, que pasó de ser una novedad para jóvenes a convertirse en la aplicación más utilizada de todas las edades.
Aunque la llegada de los millennials no suponga el fin de TikTok, sí significa que tenemos que cambiar nuestra forma de pensar sobre la plataforma. Si sobrevive a la prohibición aprobada recientemente por el Senado estadounidense, TikTok parece destinada a pasar de ser una aplicación para jóvenes a ser para todos, lo que significa que su importancia cultural no hará sino crecer.
El envejecimiento de los usuarios, no implica necesariamente la desaparición de las redes. En su artículo, Broderick apuntaba al fenómeno de la mierdificación (conocido en inglés como enshittification) según el cual las plataformas atraen a la gente con herramientas útiles al principio, para luego degradar poco a poco la experiencia del usuario rindiéndose a la presión de crecer más y obtener beneficios para los accionistas. En general, esta es la razón por la que las búsquedas han empeorado tanto, por la que Amazon está llena de productos de baja calidad y por la que todo el mundo se queja de Microsoft Teams.
Por un lado, este proceso es bastante independiente de la edad; sencillamente, se trata de un conjunto de tácticas comerciales que las empresas utilizan para exprimir más y más los bolsillos de sus usuarios. «Puedo imaginarme que esto le ocurra a LinkedIn, por ejemplo, y no tendrá que ver con que la red social deje de ser cool«, afirma Kevin Munger, profesor adjunto de Ciencias Políticas en ls Universidad Estatal de Pensilvania que estudia cómo utilizan las redes las distintas generaciones.
El problema de Facebook no es que se haya convertido en una plataforma para gente mayor y eso no atraiga, sino que todos los susceptibles de irse a otras redes lo han hecho
Por otro lado, según Doctorow, los efectos de esa mierdificación, pueden ser muy diferentes para las distintas generaciones: al igual que los jóvenes suelen ser los primeros en utilizar una nueva plataforma, cuando esta se convierte en basura, son los primeros en huir.
Es una cuestión del coste del cambio: «La gente se muda cuando la plataforma en la que está no le satisface», explica Doctorow. Para un joven sin muchos compromisos que le aten, es relativamente fácil abandonar una red social y conectarse con sus amigos en otra. Cuanto mayor es una persona y más utiliza la plataforma (por ejemplo, para relacionarse con clientes, mantenerse en contacto con antiguos amigos de la universidad u organizar viajes compartidos), más complicado le resulta abandonarla.
«El problema de Facebook no es que se haya convertido en una plataforma para gente mayor y eso no atraiga, sino que todos los susceptibles de irse a otras redes, lo han hecho», señala Doctorow.
Ahora, hay indicios que señalan la mierdificación de TikTok. En una investigación realizada en noviembre, los reporteros de Business Insider vieron 1.000 TikToks y descubrieron que aproximadamente uno de cada tres era un anuncio. Por otro lado, TikTok Shop, la parte de la plataforma dedicada al comercio electrónico que ya está disponible en Estados Unidos o Reino Unido (pero aún no en España), ha polarizado mucho a los usuarios.
«Tengo amigos que afirman que TikTok Shop ha arruinado la app», comenta Casey Lewis, investigadora de tendencias. «No es más que un grupo de gente tratando de convencer a los usuarios de que compren», añade.
Pero hasta ahora, Lewis no ha tenido la sensación de que TikTok Shop esté alejando necesariamente a los jóvenes. En 2023, la plataforma en Estados Unidos todavía mantenía al 62% de usuarios de 18 a 29 años, y el 63% de los de 13 a 17 años, estadísticas que se han mantenido relativamente estables en el tiempo.
Los miembros de la generación Z cuentan que suelen oír que sus compañeros están reduciendo el uso de TikTok por diferentes motivos: «Algunos se dan cuenta del tiempo que pasan en la aplicación», dice Jonathan Gelfond, estudiante de 19 años de Psicología y Comunicación de la Universidad de Santa Bárbara (California, Estados Unidos).
Taylor Lorenz, columnista de tecnología de The Washington Post y autora de Extremely Online, comenta que, en su opinión, el aumento de usuarios millennials puede ser una buena noticia para la plataforma. «Los millennials tienen un mayor poder adquisitivo, lo que puede ser bueno para la plataforma, siempre que sea capaz de capitalizar ese cambio generacional de usuarios», argumenta.
Lorenz cree que YouTube es una comparación más acertada que Facebook. «YouTube es mucho más una aplicación de entretenimiento que TikTok», afirma. «Y para que no se nos olvide, en los años posteriores a su lanzamiento en 2005, la plataforma de vídeo también se asociaba con gente joven haciendo cosas, como vídeos de gatos», añade. Ahora, con casi dos décadas de vida, los usuarios de YouTube son de todas las generaciones y utilizan la plataforma por todo tipo de razones.
«No creo que nadie piense en YouTube como una red aburrida o cutre, algo que sí pasa con Facebook», reflexiona Lorenz. Por su parte, Munger señala que el aumento de la audiencia podría dar lugar a contenidos más sosos, ya que los creadores intentan atraer a más gente. Aun así, YouTube es, con diferencia, la aplicación más popular entre los jóvenes.
Con una base de usuarios que envejece, las tendencias generacionales se confunden. Que algo se convierta en viral en TikTok no significa necesariamente que la generación Z sea la causante.
La mayoría de las tendencias, como la de los vaqueros anchos, empiezan con la generación Z. Lewis, que utiliza TikTok principalmente para estudiar las tendencias juveniles, se dio cuenta de que los jóvenes publicaban en TikTok que iban a tiendas de segunda mano a comprar vaqueros anchos y baratos. «Luego, los millennials se dieron cuenta de que los vaqueros ajustados ya no eran tendencia, así que se han pasado a los anchos de marca que cuestan 200 dólares (184 euros). Sin duda, las tendencias empiezan con los más jóvenes y luego se extienden a los millennials.
Este deseo de participar en la cultura juvenil es parte de lo que hace única a la generación millenial y a este momento concreto de la evolución de TikTok
Otras tendencias se producen a la inversa. Lewis apunta a la reciente moda en Estados Unidos de las botellas térmicas Stanley, que se agotaron en minutos tras viralizarse en TikTok. Aunque la tendencia se convirtió en sinónimo de los jóvenes de la generación Z y la generación Alfa que trataban de impresionar a sus compañeros en el instituto, fue en gran medida el producto del ingenioso marketing de The Buy Guide, un grupo de tres influencers de compras millennials que empezaron a elogiar el producto en 2017 antes de asociarse con Stanley en 2020 para ayudar a promocionarlo entre nuevas audiencias.
«Las mamás millennials más entendidas fueron las primeras en sumarse a la tendencia, por lo que Stanley es un caso muy particular en que la tendencia empezó con los mayores y se filtró a los Z y luego a los Alfa», explica Lewis.
Aunque los datos de Pew sugieren que los usuarios de 35 a 49 años son ligeramente más propensos a subir vídeos que los de 18 a 34 años, es difícil decir qué papel desempeñan los usuarios de más edad en la creación de tendencias. En parte, esto se debe a la propia naturaleza de TikTok. Munger opina que, mientras algunos usuarios acceden constantemente a contenido de gente más mayor, a otros les pasa lo contrario. Lewis, por su parte, no ha notado ningún cambio. «En el apartado de «Para ti» de TikTok, siguen saliéndome vídeos de jóvenes de la generación Z contando cosas divertidas y hablando de tendencias», destaca.
Algunas personas, sin embargo, sí han notado un claro repunte de contenido relacionado con los 2000, una época en la que los millennials eran niños o adolescentes. En un artículo para Wired, Jason Parham señalaba el reciente exceso de vídeos de Chicas malas y Los Soprano como prueba de que, según uno de sus compañeros de trabajo, «ahora mandan los mayores».
Leslie Horn Petersen, una millennial madre de dos hijos y compañera mía, admite que estos viajes al pasado son parte de la razón por la que le encanta usar TikTok. Recientemente, ha estado siguiendo a un creador que publica imágenes creadas con Kid Pix, un primitivo juego de dibujo que se lanzó a finales de los 80 como alternativa infantil a Microsoft Paint. «Recuerdo haberlo tenido en las aulas de informática del colegio», explica.
Todo se reduce a la calidad del algoritmo
El renacimiento de la moda y la cultura digital a partir del cambio de milenio ha sido impulsado principalmente por la generación Z, según los expertos, pero el creciente público millennial puede imponerse como corriente dominante. En opinión de Munger, este deseo de participar en la cultura juvenil es parte de lo que hace única a la generación millennial y a este momento concreto de la evolución de TikTok. Y probablemente podamos achacarlo al hecho de que muchos millennials, al menos económicamente hablando, siguen atrapados en una especie de perpetua juventud.
«Existe una conexión entre la dificultad de esta generación de progresar en el ámbito económico. Eso hace que su interés en la cultura juvenil se alargue en el tiempo», afirma. Lo mismo podría decirse de la generación Z, lo que explicaría la fascinación compartida de las generaciones por una época anterior a los smartphones y las noticias las 24 horas del día. «Añoramos tiempos más sencillos», resume Lewis.
Los usuarios de la generación Z con los que he hablado no parecen especialmente preocupados por el envejecimiento de los usuarios. Gelfond, estudiante de la Universidad de Santa Bárbara, está encantado. Utiliza TikTok para estar al día de la política y la actualidad, y aprecia la mayor variedad de contenidos disponibles al entrar cada vez más políticos, expertos en la materia y otras fuentes verificadas. «Desde que está generando una mayor base de usuarios millennials, lo disfruto más. Además, todavía se pueden ver vídeos de baile y de influencers, pero con la opción de acceder a contenido más maduro», dice.
Sullivan, la cómica, considera que el aumento del uso de TikTok por parte de generaciones más mayores es un buen síntoma. «En los vídeos de gente más mayor nunca he visto comentarios de la generación Z que indiquen rechazo», reflexiona.
Aunque está claro que TikTok está entrando en un nuevo capítulo, todavía quedan muchas cosas en el aire. Por el momento, casi todo depende de lo que ocurra con su prohibición de TikTok en Estados Unidos, que prohibirá la aplicación por completo si la empresa matriz ByteDance no vende la versión estadounidense de la aplicación a un propietario nacional en el próximo año.
Para una aplicación que depende en gran medida de los misteriosos poderes de su algoritmo, subraya Lewis, incluso el menos drástico de estos dos resultados podría cambiar totalmente la experiencia de los usuarios de la aplicación. «Todo depende de la calidad del algoritmo. Si la experiencia del usuario sigue siendo buena, todo irá bien. Si el algoritmo empeora, no sé qué pueda pasar», afirma.