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Asuntos de dinero

El rey Carlos III mejora su imperio inmobiliario con dinero de muertos

El rey Carlos III del Reino Unido ha estado utilizando el dinero recaudado de las personas que fallecen sin testamento ni parientes cercanos para financiar mejoras en su vasto imperio inmobiliario, a pesar de afirmar que los fondos se donan a la caridad, según documentos filtrados obtenidos por The Guardian.

En una franja del noroeste de Inglaterra, una costumbre feudal ha dictado que los bienes de las personas que fallecen sin testamento ni parientes cercanos reviertan al rey a través del Ducado de Lancaster, que en su encarnación moderna funciona como algo parecido a una oficina familiar del rey, supervisando una parte de sus vastas propiedades.

En las últimas siete décadas, los ducados de Lancaster y Cornualles han generado unos 1.200 millones de libras (unos 1.380 millones de euros, al cambio actual) para Carlos III y su madre, la reina Isabel II, según ha informado anteriormente The Guardian.

El Ducado lleva mucho tiempo afirmando que el dinero recaudado de esta forma se dona a obras benéficas. Pero, en realidad, solo una pequeña parte se destina a obras benéficas.

La mayor parte, de acuerdo con el medio, se utiliza para financiar mejoras en propiedades de alquiler que posee el rey, incluidas casas adosadas, casas de campo, edificios agrícolas y graneros, lo que ayuda al ducado a obtener beneficios. El rey Carlos ha recibido este año 26 millones de libras (30 millones de euros) del Ducado de Lancaster. Ninguno de los dos ducados paga impuestos de sociedades ni plusvalías.

Cuando asumió el cargo de monarca el año pasado, Carlos III heredó el control de instituciones valoradas en unos 42.000 millones de dólares (unos 38.500 millones de euros).

No ha sido posible contactar con el Palacio de Buckingham para que haga comentarios. El Ducado de Lancaster no ha respondido inmediatamente a una solicitud de comentarios.

En una declaración a The Guardian, un portavoz del ducado indica que era el deseo del rey Carlos que los bienes de los residentes fallecidos «se utilicen principalmente para apoyar a las comunidades locales, proteger la sostenibilidad y la biodiversidad de la tierra y preservar las propiedades públicas e históricas a través de las fincas del Ducado de Lancaster».

Carlos Galán Feced